Tercera y cuarta jornada de juegos camino a la Conferencia Nacional de CONADEIP 2025
- Jaime Cuevas
- hace 5 minutos
- 3 Min. de lectura
Las Troyanas UDEM siguen su marcha firme rumbo a la Conferencia Nacional CONADEIP 2025, mostrando un crecimiento que se nota en cada set y una pasión que contagia a toda la tribuna.

La Jornada 3 fue una fiesta aurinegra. Primero, las Troyanas se enfrentaron a Anáhuac Xalapa y se adueñaron completamente de la duela con un 3-0 contundente, con servicio agresivo y un orden táctico que dejó sin respuesta al rival.
No conformes, cerraron la semana con otra actuación brillante frente al Tec Querétaro, repitiendo la receta: 3-0. Dos victorias, cero dudas. La energía, el enfoque y la unión del equipo se hicieron notar punto a punto.
Con esa motivación a tope, llegó la Jornada 4. El primer duelo fue contra la Universidad Panamericana, un rival que siempre exige nivel máximo. Las Troyanas sacaron el colmillo y se llevaron el partido 3-1, demostrando carácter en los momentos clave y recordándole a la liga que en UDEM hay talento y mentalidad ganadora.
El cierre fue ante Tec Guadalajara, uno de los rivales más duros del circuito. A pesar de la entrega total, el resultado fue adverso 0-3. Pero este equipo no se mide solo con el marcador: se mide con su coraje. Y el coraje de las Troyanas quedó intacto. Esta caída no es freno, es combustible. Es aprendizaje. Es la chispa para volver más fuertes.

Cada bloqueo, cada defensa espectacular y cada grito en la cancha lleva un mensaje:
las Troyanas UDEM están listas para pelear por lo grande.
Se viene lo mejor. Y ellas lo saben.
Porque cuando este equipo se conecta, inspira.
Y cuando se inspira… ¡no hay quien las detenga! 💛🖤🔥
¿Por qué una Batería de Pruebas Físicas es clave en el voleibol?
En el VOLEIBOL, el rendimiento no es solo cuestión de técnica o tácticas inteligentes: el cuerpo es una máquina compleja que debe responder con precisión, potencia y resistencia. Para conocer ese potencial y guiarlo en la dirección correcta, se utiliza una herramienta fundamental: Batería de Pruebas Físicas.
Pero… ¿qué es exactamente?
Una batería de pruebas físicas es un CONJUNTO ORGANIZADO DE EVALUACIONES que miden diferentes capacidades del deportista: fuerza, velocidad, potencia, velocidad de reacción, movilidad, estabilidad, entre otras. Estas mediciones permiten entender el nivel en el que se encuentra cada jugador o jugadora, así como las áreas que requieren atención para seguir progresando.
1️⃣ Detección de talentos: reconocer el potencial desde el inicio
En categorías de formación y procesos selectivos, una batería de pruebas funciona como un filtro objetivo. Algunas capacidades físicas tienen una alta correlación con el éxito deportivo en el voleibol, como:
1. Potencia de salto (acción de ataque y bloqueo).
2. Velocidad de desplazamiento en espacios cortos.
3. Capacidad de aceleración y cambios de dirección.
4. Fuerza reactiva de tren inferior (RSI).
Al medir estos parámetros, se pueden identificar características innatas o desarrolladas que destacan a ciertos atletas, facilitando la detección de talentos con proyección a alto rendimiento.
Es decir, se puede ver más allá de la técnica actual: se observa el potencial que existe en el cuerpo para evolucionar.
2️⃣ Guía para la toma de decisiones en el entrenamiento
Los datos obtenidos en la evaluación no se quedan en una hoja de Excel. Sirven como mapa para planificar el programa de entrenamiento, enfocando esfuerzos en lo que realmente impacta el rendimiento y la prevención de lesiones.
¿Cómo contribuye esto?
✅ Ajuste de cargas y progresiones según el estado real del deportista.
✅Selección de ejercicios enfocados en mejorar adaptaciones fisiológicas (fuerza, velocidad, resistencia anaeróbica).
✅Optimización de adaptaciones biomecánicas (técnica del salto, mecánica de estabilidad articular).
✅ Evaluación constante del entrenamiento.
En otras palabras: medir → planificar → entrenar → volver a medir → mejorar.
Eficacia + Eficiencia = Rendimiento Óptimo
Un cuerpo con buena técnica, pero sin potencia no llegará al balón en el punto más alto. Un cuerpo fuerte pero ineficiente biomecánicamente gastará más energía de la necesaria. Por eso, las pruebas físicas revelan cómo está funcionando la máquina completa, permitiendo incrementar no solo el rendimiento, sino también la eficiencia del movimiento.
En el voleibol, cada centímetro de salto y cada milésima en el desplazamiento cuentan. La batería de pruebas se convierte entonces en un aliado indispensable para:
1. Maximizar acciones explosivas como el remate y el bloqueo.
2. Mejorar respuesta defensiva en corto espacio.
3. Mantener un estado físico sostenible a lo largo de la temporada.
CONCLUSIÓN
La ciencia del deporte ha demostrado que lo que no se mide, no se puede mejorar. Implementar baterías de pruebas físicas en el voleibol permite tomar decisiones inteligentes basadas en datos reales, potenciando el talento y guiando el entrenamiento hacia resultados tangibles y seguros.
El futuro del alto rendimiento no se adivina… ¡Se evalúa y se entrena para alcanzarlo! 🏐💥




Comentarios